Archdiocese of Tokyo
Para Vivir La Misión Evangélica, Propuesta Para “Un Paso Al Futuro” Equipo Del Proyecto De Reorganización de La Archidiócesis De Tokio
Junio 29, 2002
Equipo Del Proyecto De Reorganización
De La Archidiócesis De Tokio
Publicado por Archidiócesis de Tokio
Cancilleria Episcopál
16-15, SEKIGUCHI 3-CHOME BUNKYO-KU, 112-0014 TOKYO
Tel. 03-3943-2301 Fax. 03-3944-8511
INDEX
- Introducción (Archidiócesis Católica de Tokyo. Arzobispo Pedro Okada Takeo)
- Vivir la Misión Evangélica – Propuestas para “Un Paso Hacia el Futuro –
- I.Intención y Finalidad de la Reorganización
- II.Reestructuración
- (A) Reorganización de las Parroquias
- (B) Consolidación del trabajo de la Archidiócesis
- (C) Problemas Relacionados
- III. El Proceso de ahora en adelante
- Desde la Oficina Diocesan de Tokyo:Una Petición y un anuncio
LISTS
Introducción
Para Vivir La Misión Evangélica
A los laicos, Religiosos y Sacerdotes de la Archidiócesis de Tokyo.
Ha pasado un año desde que fue distribuido a la Archidiócesis mi mensaje del 25 de Junio “Un paso hacia el Futuro”. Desde entonces mucha gente ha respondido a mi petición y estoy profundamente agradecido por su esfuerzo. Sus respuestas serán una ayuda útil para continuar el proceso de reestructuración.
El Equipo encargado del Proyecto, ha elaborado un nuevo documento, “Vivir la Misión Evangélica- Propuestas siguiendo Un Paso hacia el Futuro”. Les ruego encarecidamente que lean este nuevo documento, y me den un tiempo para estudiar y considerar lo que ello puede significar para nuestras Parroquias.
En este panfleto, han sido introducidos los nuevos conceptos de “Distritos de Misión” y “Comunidad Parroquial”, así como el plan de reestructuración de la Archidiócesis que detallamos mas abajo. Todavía estámos en el proceso del plan tentativo de la primera etapa y podemos hacer los reajustes oportunos, o sea que, sus opiniones serán muy bien recibidas. Finalmente, es responsabilidad del Obispo seguir de cerca el proceso hasta su conclusión.
La primera Etapa de este proceso comenzará cuando la organización de los Nuevos Distritos de Misión sean confirmados en Marzo de 2003.
Este primer paso de la reorganización no es definitivo, sino un período de prueba para la nueva combinación de parroquias, que permitira futuros cambios. En la Segunda Etapa, serán determinadas las Comunidades Parroquiales que formarán parte de cada uno de los Distritos de Misión.
El año pasado, después de la distribución de “Un Paso hacia el Futuro” tuvimos un Encuentro Diocesaño. De forma similar estámos preparando para este año otro Encuentro Diocesaño en el que nos gustaría que participarán el mayor número de personas posible y juntos reflexionar y compartir estos puntos importantes.
La Iglesia necesita siempre nacer de nuevo, es decir, volver a su orígen, que es Jesucristo.
Jesús siempre estuvo en contacto con los que sufrían, con los oprimidos, con los caídos. Jesús comunicó la Buena Noticia, en primer lugar, a los pobres. Fue amigo suyo y anduvo con ellos. La misión de la Iglesia es poner nueva vida en la misión de Jesucristo. Podemos escuchar el clamor de la sociedad Japónesa implorando la salvación y en nuestra zona de Tokyo tampoco faltan tales voces. Cómo responderá nuestra Iglesia a estos gritos que piden ayuda? No cerramos los ojos ante la gente a la que preocupa la muerte y las dificultades familiares crónicas? Que clase de problemas tiene la gente de hoy? Que clase de sufrimientos y dolores les envuelven? Que podriamos hacer nosotrpor ellos? Cuales podrían ser nuestras prioridades?
Jesús dijo a sus discipulos: “el que quiera salvar su vida la perderá, pero el que pierda su vida por mi causa, la encontrará” (Mat, 16:25). En otras ocasíones Jesús dijo a sus seguidores: “Animo, no temais, yo he vencido al mundo” (Juan 16:33) Y “Sabed que Yo siempre estoy con vosotros, hasta el fin de los tiempos” (Mat.28:20)
Confiemos en el Señor y oremos.
Señor, te pedimos envíes tu Santo Espíritu sobre cada uno de nosotros; concédenos sabiduría y comprensión en nuestro trabajo de renovación de la Archidiócesis de Tokyo, recto juicio y valor, la gracia del conocimiento de Dios y un corazón que te ame y te respete.
29 de Junio 2002
Pedro OKADA Takeo
Arzobispo de Tokyo
Vivir la Misión Evangélica
Propuestas para “Un Paso hacia el Futuro”
Reorganización de los trabajos de la Diócesis de Tokyo
Se pidió a las parroquias el estudio de “Un Paso hacia el Futuro”, mensaje dirigido por el Arzobispo Pedro Okada Takeo, el 25 de Junio de 2001 y en Diciembre, cada Bloque envió un resúmen de los distintos puntos de vista. Leyendo estos resúmenes, lógicamente el Arzobispo y los sacerdotes tuvimos la impresión de que muchos laicos, religiosos y parroquias, están considerando muy seria y constructivamente esta gran misión. Sin embargo, nos damos cuenta de que la intención de reorganización no ha sido todavía bien entendida y muchas personas sienten dificultad y sospecha.
Viendo estas reacciones, se ha procurado exponer sencillamente ambos: la intención y los planes concretos para la Reestructuración.
I. Intención y Finalidad de la Reorganización
(1) La finalidad central es “Vivir la Misión Evangélica”
La Reestructuración de la Archidiócesis que es la Reorganización del sistema de Parroquias, intenta dar nueva vida a la Evangelización. En el mensaje “Un Paso hacia el Futuro” se dice: “es imperativo que la Iglesia, como una comunidad en misión y en donde los que están en posición mas debil, pueden encontrar salvación, examine su propia realidad de una manera radical, para ser verdaderamente renovada.”(III-3).
Aquí, la palabra Evangelización, no solamente significa “proclamar la Buena Noticia de Dios, afirmar las enseñanzas de Cristo a los que no conocen su nombre y administrar el Bautismo”. También significa vivir “la misión que la Iglesia recibió de Cristo Resucitado”. En la mayor parte de los documentos, la Iglesia Japónesa usa la palabra “Senkyo” como una traducción de la palabra inglesa “Mission”; la palabra original latina “Missio” significa “Envío”. El Nuevo Testamento tiene varias frases relacionadas al “Envío” (Mission, SenKyo)”. Son expresiones como “ser testigo” por medio de la palabra o el estilo de vida (cf. Hechos 1,7-8), y continuar la misión de Jesus, que fue enviado por el Padre a la tierra a vivir entre nosotros hace 2000 años (cf. Juan 20,21-23)
En este Documento nosotros usaremos el termino “Misión Evangélica”, para expresar la misión que la Iglesia de hoy debe llevar adelante; la misión que la Iglesia recibió de Cristo y que es la propia misión de Cristo que fue enviado por Dios a Palestina hace 2000 años.
Como Cristo por medio de sus palabras y acciones despertó la confianza y la esperanza en el corazón de las personas de su tiempo que esperaban la salvación, así también nosotros queremos ser signos de esperanza y salvación para las personas de nuestro tiempo. Esta es nuestra misión, vivir la ” Misión Evangélica” y esto es a lo que apunta principalmente la Reorganización que ha comenzado nuestra Archidiócesis de Tokyo.
(2) “Sentido de Misión” en Crisis
Al mirar a distancia la crisis, vemos que las parroquias pueden estár perdiendo la visión de su llamada especial a participar en la Misión Evangélica.
Como muestra la historia de la Iglesia, cuando las Iglesias pierden de vista su fin, que es vivir la Misión Evangélica, pierden vitalidad y decaen. Y si la Iglesia pierde este sentido de misión y centra su atención en protegerse a sí misma, deja de actuar como instrumento de la salvación de Dios para los demás. Podemos ver que las fuerzas que dominan en el mundo son el dinero y los deseos. En efecto, los escándalos que afligen en el presente a la Iglesia Católica -dinero y abuso sexual- son en gran parte por la falta de este especial sentido de la Misión Evangélica que no está visible en muchas iglesias. Esta crisis no es solamente un problema causado por algunos sacerdotes y religiosos; es necesario reconocerlo como un problema que afecta a toda la Iglesia.
En el mundo actual, especialmente en una sociedad con fuertes tendencias consumistas, mucha gente está tan envuelta y sobrecargada de información y de deseos materiales, que no se siente dispuesta a ver su propia pobreza espiritual y su real necesidad de salvación. La economía tiene una profunda influencia en todas las cosas y no es facil para la gente caer en la cuenta de su propia vaciedad espiritual y deseos interiores y de que Cristo es la luz para soluciónar nuestros problemas. Tenemos que admitir como un resultado de esta crisis, que tanto Sacerdotes, como Religiosos y Laicos estámos perdiendo el sentido de misión.
(3) Iglesia, lugar sin atractivo para los jovenes
Es un hecho evidente la escasa proporción de jovenes en nuestras parroquias Japónesas. Aunque hay excepciones, está claro que no solo los sacerdotes sino también el laicado está envejeciendo. Si reconocemos esta realidad como parte del sistema de nuestras parroquias, no podemos mas que mirar el futuro con pesimismo.
Se han organizado celebraciones para las generaciones mas jovenes y se trabaja en la promoción de vocaciones; sin embargo, no pensamos que ésto sea la solución. El problema básico es que la Iglesia está perdiendo todo atractivo para las generaciones jovenes por el hecho de que no se ve ya mas su razon de existir en nuestra sociedad. En otras palabras, las parroquias en su forma actual de funciónamiento, no son “un signo de salvación o un instrumento de salvación” en la sociedad de hoy. Si la Iglesia es verdaderamente un signo de salvación, nosotros creemos, que habrá jovenes que quieran poner sus vidas al servicio de Cristo.
(4) Necesidad de Cambio de Mentalidad y Estructuras.
Para una futura renovación de la Iglesia se requiere una compresion mas profunda de la fe, renovación espiritual y un cambio en nuestro modo de pensar. Desde el Concilio Vaticano II se ha puesto mucho énfasis en estas tres cosas, que fueron afirmadas nuevamente en el NICE (Convención Nacional para Incentivar la Evangelización). Muchos laicos, sacerdotes y religiosos han redescubierto su misión Evangélica como cristianos en la sociedad contemporánea y están viviendo su testimonio de fe. Sin embargo tenemos que admitir que la renovación no ha penetrado en toda la Iglesia.
Tal vez en nuestra Diócesis las estructuras pueden haber sido obstáculo para el cambio necesario. Cuando la Iglesia se identifica con el sistema parroquial, puede suceder que las estructuras usurpen la prioridad de la misión.
(5) Superar la actitud de “Defender mi Parroquia”
La parroquia ha sido y todavía es la comunidad mas cercana para los fieles, una comunidad donde la gente ha profundizado su fe a través de la liturgia y catequésis y la fe se ha transmitido de una generación a otra. Este sistema parroquial ha tenido una importancia enorme en nuestra vida de fe.
Por otra parte es dificil decir que las parroquias han respondido siempre bien a las necesidades y cambios de la sociedad. Al enfrentarse con las dificultades de la situación actual, las parroquias pueden convertirse en “introvertidas y defensivas”.
Problemas que se siguen de lo anterior.
1) En una parroquia, el sacerdote asignado intenta generosamente vivir su Misión Evangélica lo mejor posible, como individuo y como parroquia. Sin embargo, es posible que sus buenos esfuerzos en esta línea, no continuen cuando se haga cargo de la administración de la parroquia un nuevo sacerdote. El resultado es que no es facil mantener en la parroquia esta visión misionera. A la larga es possible que los sacerdotes se centren mas en sus ocupaciones diarias dentro de la parroquia y se debilite así su sentido de misión.
2) Al centro de la relación entre los laicos y la Iglesia esta el sacerdote, y esto puede crear excesiva dependencia de él. A los laicos no se les da oportunidad de conocer sus propios carismas en la Iglesia. Ni se crean sistemas de apoyo mútuo entre ellos. Estas son cuestiones planteadas sobre la participación de los laicos en la Iglesia. Existe la tendencia entre sacerdotes, a calificar a los laicos que van regularmente a la iglesia como “creyentes celosos” y no valoran ni animan a los que no van tan frecuentemente, pero viven como cristianos en la sociedad.
3) El Obispo tiene que dar maxima prioridad a la asignación de los sacerdotes, lo cual complica los problemas y de hecho no puede hacerse bien sin una reforma estructural (ver “Un Paso hacia el Futuro” II, 1-6)
4) El resultado de todo esto es el desarrollo de una mentalidad de ‘defender mi parroquia’ donde el mantener la existencia de la propia parroquia supera todas las demas prioridades.
La Iglesia se ha centrado excesivamente en la parroquia, lo que ha contribuido a estos problemas. Para vivir nuestra propia fe es indispensable que en la parroquia exista la comunidad de fe. Pero si nos empenamos en hacer las cosas como hasta ahora, es claro que toparemos enseguida con sus limitaciones. Es necesario que superemos esta actitud de “Defender mi parroquia”.
II. Reestructuración
Al preguntarse el Equipo del Proyecto de Reestructuración (Equipo de Proyecto) como avanzar en la renovación de una Iglesia que supere estos escollos y viva el Evangelio, siguiendo la linea de pensamiento del Arzobispo Okada en su “Un Paso adelante”, proponemos los siguientes puntos.
esta Reestructuración tiene dos aspectos: (A) Reorganización de las Parroquias, y (B) Consolidación del trabajo de la Archidiócesis.
(A) Reorganización de las Parroquias.
【Primera Etapa】Crear Distritos de Misión
En Abril de 2003, despues de Pascua, las parroquias serán agrupadas en”Distritos de Misión”. En principio, se formarán grupos de tres o cuatro parroquias con el propósito de vivir juntamente la Misión Evangélica. La referencia a las actuales parroquias será como “Comunidades parroquiales” puesto que ellas son para los feligreses la comunidad básica. Como pueden ver, la dimensión de los Distritos de Misión es menor que los anteriores Bloques, para conseguir una mayor colaboración. Hasta ahora, cada parroquia ha actuado completamente independiente de las demás y la colaboración de los Bloques alcanzaba a esferas muy limitadas. Incluso algunos Bloques no tenían encuentros regulares. Por otra parte, estos nuevos Distritos de Misión, reunirán a laicos, sacerdotes y religiosos de varias Comunidades Parroquiales para que contribuyan en equipo a la Misión Evangélica.
El siguiente diagrama compará el presente y las nuevas estructuras diocesanas planificadas.
La Reorganización de las Parroquias será la siguiente:
(1) Varias Parroquias del tipo actual formarán un nuevo Distrito de Misión. Su tarea es responder a las necesidades de la gente en una comunidad mas extensa y ver maneras de vivir la Misión Evangélica.
(2) Inicialmente todavía será destinado un párroco a cada parroquia y los sacerdotes miembros de cada Distrito de Misión Católica tendrá encuentros de forma regular. Un Sacerdote será designado Coordinador responsable para mantener contactos y coordinar actividades. Naturalmente, el Obispo considerará el trabajo del equipo antes de asignar nuevos miembros.
(3) Cada Distrito de Misión formará un “Comité del Distrito de Misión”, el cual estará formado por laicos de cada comunidad parroquial, representantes religiosos en el distrito y sacerdotes del equipo. El caracter de este Comité es diferente del Consejo Pastoral existente en cada comunidad parroquial. El Comité del “Distrito de Misión” no deliberará sobre el mantenimiento de las estructuras o sobre otros planes y eventos sociales sino sobre la Misión Evangelizadora de la Iglesia y su realización. A continuación enumeramos tres aspectos clave de esta Misión Evangelizadora.
a) Extender la palabra del Evangelio
b) Dar gracias y alabar juntos a nuestro Senor
c) Ayudarnos mútuamente.
Según esto, la Iglesia será el signo visible del Amor de Dios. Mas concretamente, las tareas que esperan a los Distritos de la Misión Católica son:
1) Los laicos y sacerdotes tendrán que reflexionar sobre cómo vivir la Misión Evangélica y responder a las necesidades de la gente de esa zona.
2) Determinar el lugar y tiempo para Sesiones de estudio Bíblico y preparación bautismal. Posiblemente los horarios de las Misas necesiten un reajuste como respuesta a las peticiones de la gente y a facilitar su colaboración. También los retiros se podrían organizar conjuntamente.
3) Por medio de este proceso de colaboración, podrían aflorar las características especiales de cada comunidad parroquial.
4) Habra que considerar con perspectiva de futuro y en vistas a la Misión Evangélica el uso de edificios y otras instalaciones.
5) Al enfermar un sacerdote o si se ausenta para unas vacaciones largas, la ayuda inicialmente procedera de dentro del Distrito.
(4) Las agrupaciones sugeridas para los Distritos de Misión no están determinadas. La primera etapa es un periodo de prueba. Después de esta etapa inicial, los grupos pueden ser cambiados.
(5) El fomentar la cooperación dentro de los Distritos de Misión, no niega la necesidad de colaboración a otros niveles, como podría ser en las áreas de los distintos Bloques. Sin embargo, la estructura de los antiguos Bloques ha sido desmantelada y hay que aceptar que las estructuras de los nuevos distritos se desarrollen y respondan mejor a las demandas de la misión.
(6) El proceso de formación de los Distritos de Misión no debilitará la conexión de la gente con sus Comunidades Parroquiales. Se reunirán para actividades locales y para compartir intereses comunes y problemas. Los laicos se apoyarán unos a otros y compartirán su experiencia de fe. Aquello que pensaban algunos de que “no se puede empezar alguna cosa sin el sacerdote” ya se acabó. Hay que construir un nuevo tipo de relaciones entre los laicos. Trabajar mas allá de los límites de la Comunidad Parroquial podría ayudar a progresar mas facilmente.
Será importante suscitar y promover lideres laicos y ministros laicos a nivel de las comunidades parroquiales.
(7) Cuando comiencen las actividades de los Distritos de Misión surgiran problemas financieros. Mas adelante volveremos al tema con mas detalle. En principio el sistema actual de cuentas según el cual cada parroquia paga un salario a su propio Sacerdote cambiará. Según el nuevo principio, la Archidiócesis de Tokyo pagará los salarios de los sacerdotes que trabajan en las parroquias o tengan un trabajo oficial en la Diócesis asignado por el Arzobispo (incluyendo Sacerdotes de Ordenes Religiosas y Congregaciones Misioneras) Otros detalles los encontrarán mas adelante en este documento.
★Necesidad de cambio en nuestro modo de pensar
Aparentemente esta reestructuración se concentra en torno al cambio de sistema, pero necesita ser acompañado por un cambio completo de mentalidad. Sin esta revolución en nuestro modo de pensar no alcanzaremos los resultados deseados.
En primer lugar, los sacerdotes necesitan tomar “conciencia del trabajo y colaboración con otros sacerdotes” y necesitan “hacerse conscientes de que tienen que tratar y decidir los asuntos juntamente con los laicos”. Es necesario un cambio inminente en la imagen tradiciónal que se tiene de los párrocos de que toda la autoridad y toda la responsabilidad cae sobre sus hombros.
Los laicos necesitan ser “conscientes de que ellos están participando en las táreas esenciales de la Iglesia”. No pueden depender pasivamente del sacerdote. Necesitan apoyarse unos a otros para ser testigos de Cristo. También es importante que cada persona laica sea consciente de que a través de las diferentes actividades y su propio estilo de vida, están participando en la Misión Evangélica. Deberan encontrar mas espacio dentro y fuera de la Iglesia para ejercitar sus carismas.
★Estimular la participación de las Ordenes Religiosas
En la Archidiócesis de Tokyo, sacerdotes miembros de Ordenes Religiosas trabajan en muchas parroquias. Algunos de estos están en la oficina central de la Orden Religiosa ubicada en el área de Tokyo. Algunas de estas parroquias trabajan a gran escala. Debido al buen trabajo de un equipo de sacerdotes, las buenas instalaciones y su conveniente situación geográfica, estas parroquias consiguen grandes frutos. Las Ordenes Religiosas están invitadas a participar plenamente en la Reestructuración de la Archidiócesis de Tokyo y a compartir sus ideas sobre el proceso.
★Cooperación con Ordenes Religiosas e Instituciones Católicas
La Misión Evangelizadora de la Iglesia no puede realizarse solo por la acción de los Distritos de Misión, las Comunidades Parroquiales y la Archidiócesis. Ordenes Religiosas femeninas y masculinas, Instituciones Católicas y Movimientos Laicos, han jugado siempre un papel muy importante en la misión de la Iglesia. Desgraciadamente ellos también tienen el mismo problema serio de escasez de gente joven para llevar adelante su misión. La cooperación con comunidades diocesanas y parroquiales puede ayudar a compartir los puntos fuertes de cada grupo. Nosotros no podemos hacer aquí ninguna sugerencia sobre como proceder con esta colaboración, sin embargo es importante fortalecer las relaciones entre Ordenes Religiosas y otras Instituciones dentro de la Comunidad Parroquial. Para facilitar una creciente colaboración ofrecemos en la pag. 24 una lista de Ordenes Religiosas e instituciones en cada Distrito de Misión y Comunidad Parroquial.
★Como se ha llegado a los Distritos de Misión
El “Equipo de Proyecto” ha llegado a la formación de los grupos de Parroquias presentados en la pagina 21, basados en las opinions recogidas en cada Bloque en Diciembre del 2001 y en las reunions mensuales de Sacerdotes. Básicamente creemos que para reforzar la colaboración entre las parroquias, es importante la facilidad de acceso y el transporte público. Les pedimos a todos nos envíen su opinion sobre este plan de la Archidiócesis para poder hacer las correcciones necesarias al plan de agrupación antes de llevarlo a la práctica en Abril de 2003.
【Segunda Etapa】Futura Integración de los Distritos de la Misión Católica
Los Distritos de Misión se integrarán gradualmente y se identificarán como la nueva forma de parroquia en la Segunda etapa. Ello no significa que necesariamente esta transformación de los Distritos de Misión funcionen al mismo ritmo en todas partes. La mayor o menor integración dependera a veces de la preparación hecha y a veces vendra dictada por la necesidad.
La parroquia es la unidad pastoral reconocida por el Derecho Canónico. La unidad pastoral donde un sacerdote es nombrado por el obispo, como guia (ayuda). El nuevo tipo de parroquia que está siendo introducido aquí, no es precisamente una extensión de la parroquia para una mayor eficiencia en el trabajo, mas bien intentamos hacer posible un trabajo de equipo formado por laicos, sacerdotes y religiosos centrado en la Misión Evangélica. Ver el diagrama del plan de integración.
Los puntos clave de la siguiente etapa serán:
(1) El sacerdote encargado de supervisar el Distrito de Misión, será conocido como el Pastor (“Párroco”) del Distrito y los otros sacerdotes del Distrito como Sacerdotes Colaboradores. Cada Distrito de la Misión Católica, tendrá un Equipo de Pastoral Misionera, formado por sacerdotes, diáconos, laicos y religiosos para fortalecer la realización de la Misión Evangelizadora.
(2) Muchos sacerdotes trabajan normalmente como párrocos y tienen pocas oportunidades e interés en extender la Misión Evangelizadora mas allá de los límites de sus propias parroquias. Al reducir el número de parroquias existentes, muchos sacerdotes quedarán libres de sus obligaciones de párroco y estos sacerdotes tendrán la posibilidad de desarrollar sus talentos e interes en la misión fuera de los límites de la antigua parroquia. Un sacerdote colaborador puede tener también un trabajo de la Diócesis (menciónado en el capitulo B) o puede tener un ministerio adiciónal especial con personas que trascienden su parroquia.
(3) En cada nueva parroquia se establecerá un Consejo de economía y un Consejo Pastoral para Evangelización. Como dice el Derecho Canónico, estos Comités, son el lugar apropiado para que los laicos participen en la administración de la parroquia. Estos Comités no legislan para las parroquias sinó mas bien pretenden mejorar la colaboración entre los sacerdotes y los seglares, fomentar sus posibilidades y animarles a dar su opinión. El Derecho Canónico pide que cada parroquia tenga un Comité de Economía. También dice que la Archidiócesis debe consultar con los miembros del Consejo Sacerdotal al organizar un Consejo Pastoral (cf.Dcho. Canonico 536-537).
Las actividades parroquiales pueden ser contempladas desde dos dimensiones diferentes; una es la económica y la otra pastoral. Según la terminologia del Dcho. Canonico, el Consejo de la Pastoral de Evangelización se refiere al Comité de Pastoral. El nombre anterior es usado aquí porque el significado del termino “pastoral” es muy limitado para reflejar la situación en Japón. Esperamos determinar mas adelante un nombre mas adecuado.
(4) Es necesario reconsiderar el sistema administrativo y financiero de las Parroquias.
(B) Consolidación del trabajo de la Archidiócesis
La Diócesis, en cuyo centro está el obispo, no es una mera división de la administración eclesiastica o una reunión de parroquias.
“Una Diócesis es una parte del Pueblo de Dios encomendada a un Obispo para ser guiada por él con la ayuda de sus sacerdotes, fieles al pastor y formados por el dentro de una comunidad en el Espíritu, por medio del Evangelio y la Eucaristia; constituye una Iglesia particular en la cual la Iglesia de Cristo que es una, santa, católica y apostólica, está realmente presente y activa”.(Documentos del Concilio Vaticano II,11- “Decreto sobre la Pastoral de los Obispos en la Iglesia).
Las parroquias que tenemos en Japón son pequeñas y lo que podemos hacer es muy limitado y como Iglesia de Cristo nos estámos esforzando por responder a los que tienen hambre y sed de salvación. Cosas que no pueden llevarse a cabo por un solo Distrito de la Misión Católica o Comunidad Parroquial, pueden llegar a realizarse con la colaboración y asistencia de toda la Archidiócesis. Por lo tanto es esencial que la Archidiócesis como tal viva su Misión Evangélica.
Aquí no podemos enumerar todas las tareas que la Archidiócesis tiene que realizar porque son muchas. En el apartado IV-2 de “Un Paso hacia el Futuro”, son enumerados ocho tareas importantes de la Archidiócesis. Parece imposible realizarlas todas al mismo tiempo, puesto que ello supondria gran dispersión de fuerzas y, posiblemente, pobres resultados. Consiguientemente, el “Equipo de Proyecto” ha reducido la lista a tres tareas prioritarias a las que hay que responder inmediatamente.
1) Formación de laicos para vivir la Misión Evangélica
2) Apoyo a creyentes católicos extranjeros y acompañamiento en sus dificultades.
3) Acompañamiento a personas enfermas o que sufren espiritual o sicológicamente.
estas son las tareas mas apremiantes para la Archidiócesis pero son demasiado dificiles como para que los párrocos se encarguen de ellas individualmente. Nuestra Archidiócesis necesita destinar un número de sacerdotes para trabajar en estos campos, en colaboración con laicos y religiosos. Además, para que las cosas funcionen bien, es necesario que un buen número de sacerdotes trabajen en las oficinas de la Diócesis. La Archidiócesis de Tokyo tiene relativamente mas sacerdotes que otras Archidiócesis de Japón; consiguientemente nuestra contribución en personal para la Formación del Seminario debe ser mayor. Considerando todas las parroquias de la Archidiócesis, es evidente que el número de personas de que disponemos es muy escaso.
La reorganización de las parroquias y la consolidación del trabajo de la Archidiócesis han sido explicados detalladamente. Para promover y llevar a cabo el trabajo a pesar del número limitado de sacerdotes, tenemos que realizar la Segunda Etapa, que es la reorganización de las parroquias para reducir el número de párrocos y así liberar a sacerdotes auxiliares que puedan dedicarse a estas tareas prioritarias de la Archidiócesis.
★Explicación de los tres Puntos
(1) Preparación de los Seglares.
En las parroquias actuales es excesivo el trabajo que recae sobre los sacerdotes y muchas actividades pueden hacerlas los seglares. No solamente la administración financiera sino también tareas relaciónadas directamente con la Misión Evangélica de la Iglesia. Los puntos principales en los que participarán los laicos, serán, por ejemplo, la instrucción catequética a personas de diversas edades, servicio durante la liturgia (incluyendo la dirección de la liturgia y distribución de la sagrada Comunión), visita a enfermos, acompañamiento a personas que sufren o se sienten solas, apoyo mútuo en la fe y liderazgo en los pequeños grupos. Con el fin de obtener resultados satisfactorios de estas tareas, es importante la selección de personas y una preparación adecuada. Los Distritos de Misión podrán proporcionar esta formación, pero la Archidiócesis de Tokyo será responsable de crear las pautas a seguir y ayudará en algunas etapas de la preparación.
(2)Atención Pastoral y Apoyo a Extranjeros.
El Centro Católico Internacional de Tokyo (CTIC) ya está procediendo activamente en estas cuestiones y muchas parroquias han estádo respondiendo bien a las necesidades de los extranjeros. Existen también muchas Comunidades Católicas de Extranjeros pero en muy pocas parroquias se celebran misas en lenguas extranjeras. Muchas de estas misas en lengua extranjera empezaron simplemente porque algún sacerdote residente en la parroquia conocía una lengua extranjera. Al ser trasladados a otro lugar estos sacerdotes, ha habido problemas en la continuidad de estas misas. Estos problemas nos fuerzan a reconocer que nosotros no estámos respondiendo tan bien como debiéramos a las necesidades espirituales de los extranjeros. El documento “Directrices Pastorales para la Iglesia Multicultural de Japón” (Provincia de Tokyo, 1.998) usa el término “Iglesia Base”. Al introducir este nuevo término, el documento indica lo importante que es el reexaminar nuestra desorganizada manera de responder a las necesidades pastorales de los extranjeros y la importancia de un sistema que garantice la continuidad de nuestro servicio pastoral.
A lo largo y ancho de la Archidiócesis de Tokyo se está extendiendo gradualmente el uso de Liturgias en lengua extranjera y un nuevo Servicio Pastoral. Alrededor de unas veinte Comunidades Parroquiales serán destinadas como Iglesias Base, y se nombrarán sacerdotes para el Servicio Pastoral a Extranjeros.
(3) Acompañamiento a personas que sufren a causa de trauma espiritual o siquico o a causa de enfermedad.
En todas las parroquias hay personas con alguna enfermedad mental o que sufren internamente por otros problemas. El estilo actual de vida es causa de estres en nuestra sociedad y aumenta el número de las personas que sufren por su causa. Los creyentes católicos no son una excepción. También en la Iglesia a veces resulta dificil poder hablar de ello, pero muchas familias sufren porque tienen algún miembro sicológicamente enfermo.
está aumentando el número de personas traumatizadas por desastres o crímenes, de mujeres víctimas de sus compañeros (violencia doméstica) y ninos que por el abuso de sus padres están sicológicamente heridos.
Muchas parroquias han tendido a dejar estos problemas en manos de los médicos. Dado que si personas con pocos conocimientos de siquiatría se inmiscuyen en estos problemas, la situación suele empeorar, estas materias se dejan generalmente en manos de profesionales.
Sin embargo, la Iglesia no debe abandonar a los que sufren a causa de estas enfermedades internas.
1) La medicina siquiátrica ha progresado significativamente y son muy pocos los enfermos que necesitan una larga hospitalización. Pero la sociedad no está capacitada para recibirlos y las dificultades de la vida podrían agravar su situación. En realidad, fuera de las parroquias es dificil encontrar un lugar que ofrezca acogida y aceptación sin preocuparse por el costo.
2) todavía hay mucha gente que se resiste a visitar al siquiatra y tiene muy poca información sobre la siquiatría. Las familias pueden encontrarse totalmente perdidas respecto a estas situaciones, y pocas organizaciones públicas pueden aconsejar debidamente a aquellos que sufren problemas mentales. En consecuencia la gente acude a las parroquias buscando aceptación y consejo.
3) Según el Evangelio, Jesús respondió positivamente y tendió su mano para ayudar a los enfermos y a la gente que sufría espiritual y mentalmente.
La violencia doméstica y el abuso de los niños están conectados con los derechos humanos. La Biblia pone énfasis en una especial consideración para los “huérfanos y las viudas” y la prioridad de la Iglesia también ha de ser tender la mano a estas víctimas.
Cosas que pueden hacer las Parroquias.
1. Consultorio
(Aconsejar sobre el cuidado apropiado y recomendación de especialistas)
2. Acompañamiento en la crisis
(Visitar y ayudar cuando ocurre una crisis)
3. Apoyo y atención a la larga cuando vuelven a la sociedad.
(Durante la convalecencia ayudar a reconectar con la sociedad y a renovar las relaciones).
Deberíamos pensar urgentemente en la necesidad de algún “shelter” (casa de acogida) para víctimas de violencia doméstica y abuso.
Ocuparse de estas materias supera la capacidad de una parroquia o sacerdote, de modo que es necesario formar una organización Diocesana con las personas adecuadas para hacerse cargo de la organización.
(C) Problemas Relaciónados.
【Problemas Económicos】
Para ir adelante con la reorganización, el “Sistema de Auto-financiamiento Económico de las Parroquias” necesita ser revisado.
(1) En lo que toca al Salario de los Sacerdotes
En la actualidad, la parroquia tiena la obligación de pagar el salario al sacerdote. La Archidiócesis desea que cada parroquia pague “la Contribución a la Oficina Diocesana # 3”; esta contribución es usada para pagar los salarios de los Sacerdotes diocesanos y de las Sociedades Misioneras, aunque el dinero originalmente viene de sus propias parroquias. Es cierto que en las Parroquias dirigidas por Sacerdotes de Ordenes Religiosas la Parroquia es responsable de los salarios. En el momento presente hay un buen número de sacerdotes trabajando fuera de las parroquias (por ejemplo en las Oficinas Diocesanas). Sus salarios están cubiertos por la Archidiócesis. Según la reorganización de las parroquias y cambios relacionados con ello, el estilo actual en que un sacerdote trabaja y es pagado por su propia Parroquia, cambiará gradualmente. Siguiendo el nuevo principio en que la Archidiócesis se responsabilizará de los salarios de los sacerdotes y cada parroquia compartirá responsablemente para ello, nos gustaría repensar el sistema actual de contribuciones a la Oficina Diocesana.
Sugerimos a las parroquias dirigidas por Ordenes Religiosas que adopten un sistema semejante.
(2) Reconsiderando la situación Económica de los Sacerdotes.
En las presentes circunstancias, hay una gran diferencia entre los ingresos de los sacerdotes, dependiendo de la parroquia a la que están asignados y el tipo de trabajo que hacen. Esta diferencia de ingresos podría ser un obstáculo al considerar los cambios de personal y la promoción de una relación de cooperación mas cercana. Tal vez sea necesario buscar alguna clase de política financiera sobre los ingresos, que permita a los sacerdotes trabajar sin preocupación económica y al mismo tiempo mantener un estilo de vida sencillo.
(3) Otras cuestiones..
Debemos estudiar cuidadosamente todo el sistema de cuentas de la Archidiócesis; esto puede llevar a la necesidad de preparár directrices para los Distritos de Misión y las Comunidades Parroquiales. Las actividades de las parroquias al servicio de la Misión Evangélica deben tener prioridad sobre la idea de mantener las estructuras parroquiales. Será necesario examinar el sistema de fondos para la construcción y reparación de edificios parroquiales, que corrientemente se tratan separadamente por cada Comunidad Parroquial.
【Otros problemas y como tratarlos】
Además de los problemas económicos, la reestructuración de la Diócesis tocará otros muchos puntos que eventualmente habra que afrontar. Nuevos Comités serán instituidos para estudiar y hacer propuestas sobre los temas siguientes:
1. Reorganización de las Finanzas de la Archidiócesis
2. Establecimiento de “Iglesias Base” para Extranjeros
3. Acompañamiento de personas con trauma espiritual o sicológico y enfermos.
4. El futuro de los Jardines de Infancia Diocesanos
5. Principios básicos para los Distritos de Misión y las Comunidades Parroquiales.
En estos Comités participarán también seglares y religiosos expertos. En cuanto a la reestructuración general, diez personas laicas y religiosas, han sido invitadas a participar en una “Comité de dialogo a Mesa Redonda para la Reestructuración”, que funcionará como caja de resonancia para conocer diversas y opuestas opiniones sobre el proceso de reestructuración.
III. El Proceso de ahora en adelante.
Nosotros sugerimos que los laicos, sacerdotes y religiosos de la Archidiócesis de Tokyo examinen a fondo las propuestas de “Un Paso hacia el Futuro”. Agradeceremos muchísimo su cooperación en este proceso que intentamos poner en marcha.
【Julio – Septiembre】Cada Parroquia y Bloque discutirá las propuestas. A fines de Septiembre, cada Bloque recogerá las opiniones y enviará un resúmen al “Equipo de Proyecto”.
【Octubre】El “Equipo de Proyecto” reunirá las respuestas y mandará una Parroquia antes del Encuentro Diocesano.
【27 de Octubre】En el Encuentro Diocesano se tratarán estos temas. Principalmente la reorganización de las parroquias y puesta en marcha del plan de reestructuración. Estos planes están sujetos a modificación de acuerdo a las respuestas recibidas.Después de ésto el Arzobispo decidirá sobre la reforma y la hará pública.
【Nov. – Marzo】Este periodo será un tiempo de preparación para la creación de los Distritos de Misión que se harán juntamente con toda la Archidiócesis. (Habrá encuentros para que los sacerdotes se familiaricen con los cambios que será necesario establecer en los Distritos de Misión). Cada Distrito de Misión creará oportunidades para el intercambio de unas Comunidades Parroquiales con otras.
【Abril 2003】El 20 de Abril, después de Pascua de Resurrección, los “Distritos de Misión” se establecerán formalmente como Primera Etapa de la Reorganización de las Parroquias
Equipo del Proyecto de Reorganización de la Archidiócesis de Tokyo
Junichi Iwahashi(Parroquia deSekiguchi)
Keiji Kousa (Parroquia de Tokuden)
Masakazu Tachibana(Parroquia de Meguro)
Shigeru Tsuji(Parroquia de Tachikawa)
Leo Schumacher(Parroquia de Toshima)
Kazuo Koda(Miembro de Equipo de Reorganización de la Archidiócesis de Tokyo)
Celestino Cavagna,
Yuji Urano,
Junichi Ebe (Oficina de la Diócesis de Tokyo)
Desde la Oficina Diocesana de Tokyo: Una Petición y un anuncio
・Sugerimos que en los encuentros de cada Parroquia y Bloque, se hable de las siguientes cuestiones.
1) Está Uds. de acuerdo con las razones presentadas por este Bloque para la reorganización de la Archidiócesis?
2) Que nuevas posibilidades espera Ud. que surjan de los Distritos de Misión?
Que preocupaciones tiene Ud. sobre ello?
3) Ve Ud. algún problema en la agrupación de Parroquias que formarán los nuevos Distritos de Misión, tal como están presentados en las paginas siguientes? Exprese claramente, por favor, las razones para sus objeciones y proponga un plan alternativo tan concreto como le sea posible.
4) Tiene Ud. alguna idea positiva o recomendación, respecto a los tres puntos prioritarios tratados en la sección “Consolidación del trabajo de la Archidiócesis”?
・Las propuestas han de ser discutidas, primero, a nivel de Bloque y una vez examinadas serán remitidas al Equipo de Proyecto. Aceptamos igualmente ideas y planes de parroquias particulares, religiosos y laicos. Como menciónamos en paginas anteriores, la fecha de cierre es el 30 de Septiembre.
Dirección:
“Equipo del Proyecto de Reorganización
Archidiócesis de Tokyo, 3-16-15 Sekiguchi
Bunkyo-Ku. Tokyo 112-0014
Fax: 03-3944-8511
E-mail: koda@tokyo.catholic.jp
(Por favor, asegurese de poner en la dirección “Equipo del Proyecto de Reorganización”. Para facilitar la sistematización agradeceremos lo remitan por E-mail o, al menos, que incluyan el floppy.)
・Información sobre el Encuentro Diocesano:
Otros detalles serán comunicados mas adelante.
Fecha: 27 de Octubre (Domingo) 2002 PM 2:00 ~ PM 4:30
Lugar: Catedral de Santa Maria
Participantes: Arzobispo, Sacerdotes de la Archidiócesis, Representantes de Ordenes Religiosas y Parroquias.
Los Encuentros Diocesanos no serán ocasión para tomar decisiones sobre la Archidiócesis, sino una oportunidad para compartir nuestras opiniones y profundizar en nuestro conocimiento de la reorganización de las parroquias. La participación en los Encuentros Diocesanos serán una gran ayuda para que las decisiones lleguen a buen término. Muchas gracias por su comprension y colaboración.
Plan para la organización de los Distritos de la Misión Católica
№ | Parroquia (sub-parroquia) |
Grupo Responsible | Antiguo Bloque |
No. De Feligreses |
Número Total |
Notas |
1 | Akabane
Oshima Sekiguchi Hongo |
Conventuales
Diócesis Diócesis Diócesis |
Joto
Chuo Chuo Chuo |
1,332
29 2,035 475 |
3,871 |
Por relación con la Catedral están unidas a la Cancilleria. Akabane está cerca de la Diocesis de Urawa pero no está lejos de Sekiguchi |
2 | Kanda
Kojimachi |
Diócesis
Jesuitas |
Chuo
Chuo |
1,267
10,972 |
12,239 |
No solo están cerca sino que ambas Parroquias tienen caracteristicas especiales y trabajan en union con la Cancilleria. |
3 | Kasai
Shiomi Tsukiji |
Agustinos
Diócesis Diócesis |
Sobu
Sobu Chuo |
844
379 366 |
1,589 |
En vistas al rapido aumento de condominios en la bahia. |
4 | Adachi
Umeda (sub) Ueno Kameari Mikawashima Machiya (sub) |
Salesianos
Diócesis Diócesis Conventuales Salesianos Diócesis |
Joto
Joto Joto Joto Joto Joto |
456
258 581 364 669 138 |
2,466 |
Poca distancia entre ellas y dimensiones reducidas. |
5 | Asakusa
Ichikawa Koiwa Honjo |
Diócesis
Diócesis Diócesis Diócesis |
Joto
Sobu Sobu Joto |
398
827 603 740 |
2,568 |
Conectadas por la Linea Sobu |
6 | Toyoshiki
Matsudo |
Diócesis
Diócesis |
Sobu
Sobu |
1,939
1,666 |
3,605 |
Ciudades-dormitorio comunicadas con la linea Joban. Con vistas a Newtown de Chiba. |
7 | Akatsutsumi
Setagaya Hatsudai Matsubara |
PP.Quebec
Diócesis Redentoristas PP.CICM |
Josai
Josai Josai Josai |
485
716 1,063 1,158 |
3,422 |
Próximas a Meidaimae. Linea Keio – Inokashira. |
8 | Sangenjaya
Seta(sub) Shibuya |
Franciscanos
Franciscanos Dominicos |
Josai
Josai Josai |
1,081
698 1,133 |
2,912 |
Linea Denentoshi, a partir de Shibuya. |
9 | Kitami
Seijo Machida |
Colombanos
M.E.P. Diócesis |
Josai
Josai Tama |
546
1,704 1,792 |
4,042 |
Conectadas con la Linea Odakyu. Próximas a la Diócesis de Yokohama |
10 | Omori
Kamata Senzoku |
Diócesis
Diócesis Diócesis |
Jonan
Jonan Jonan |
659
523 840 |
2,022 |
Próximas geográficamente y bien comunicadas. |
11 | Azabu
Takanawa Meguro |
Diócesis
Dominicos Diócesis |
Chuo
Jonan Jonan |
1,387
1,391 1,409 |
4,187 |
Próximas geográficamente y bien comunicadas |
12 | Denenchofu
Kaminoge(sub) Himonya |
Franciscanos
Carmelitas Salesianos |
Jonan
Jonan Jonan |
3,085
1,742 1,908 |
6,735 |
Conectadas por la Linea Toyoko |
13 | Akitsu
Kiyose Kodaira |
Diócesis
Diócesis Diócesis |
Johoku
Johoku Musashino |
601
1,321 1,069 |
2,991 |
Hacia el Oeste de la linea Seibu. |
14 | Shimoigusa
Sekimachi Tokuden |
Salesianos
Diócesis Diócesis |
Johoku
Johoku Johoku |
2,190 1,512 1,135 |
4,837 |
Hacia el Centro de la Ciudad en la linea Seibu |
15 | Itabashi
Kitamachi Shimura Toshima |
Franciscanos
Diócesis Diócesis Colombanos |
Johoku
Johoku Johoku Johoku |
752
662 279 1,280 |
2,973 |
Alrededor de Ikebukuro |
16 | Ogikubo
Kichijoji Koenji |
Diócesis
Verbo Divino Diócesis |
Musashino
Musashino Musashino |
495
5,349 1,473 |
7,317 |
Conectadas por la Linea Chuo (Nakano, Suginami, Musashino…) |
17 | Tama
Chofu Fuchu |
Diócesis
Salesianos P.I.M.E. |
Tama
Musashino Musashino |
707
1,354 688 |
2,749 |
Conectada por la Linea Keio y bien comunicadas. |
18 | Akiruno
Ome Koganei Tachikawa |
Diócesis
Diócesis Diócesis Diócesis |
Tama
Tama Musashino Tama |
194
416 1,459 1,792 |
3,861 |
Tienen a Tachikawa como centro y terminal… |
19 | Takahata
Toyoda Hachioji Izumicho(sub) |
Diócesis
Diócesis Diócesis Diócesis |
Tama
Tama Tama Tama |
787
309 1,926 (Hachioji) |
3,022 |
Con Hino y Hachioji como punto de encuentro. |
20 | Kamogawa
Kisarazu Goi Tateyama |
Diócesis
Diócesis Colombanos Diócesis |
Chiba
Chiba Chiba Chiba |
52
545 508 97 |
1,202 |
En el área Sur de Chiba. Zona muy extendida. |
21 | Chibadera
Togane Nishi-Chiba Mobara |
Colombanos
Colombanos Diócesis Colombanos |
Chiba
Chiba Chiba Chiba |
627
300 1,669 366 |
2,962 |
Chiba Central. Acceso relativamente facil. Incluye el Centro de Tsuga |
22 | Sawara
Choshi Narashino Narita |
Diócesis
P.I.M.E. Diócesis Diócesis |
Chiba
Chiba Chiba Chiba |
79
234 2,145 398 |
2,856 |
Norte de Chiba. Conectadas por las lineas Keisei y Sobu, pero muy distantes entre si. |
Roppongi | Franciscanos | 1,500 | Identificadas como Iglesias Base para el cuidado pastoral de Extranjeros.
|
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Comunidad Coreana de Tokyo | Diócesis de Seoul | 1,153 |
- Grupo responsable – Se indica deonde reside el Parroco actual.
- El numero de fieles esta basado en las estadisticas de 2001
- En la columna de Notas el Equipo de Proyecto resume sus razones para esta Reorganizacion de las Parroquias